Aké

Zona arqueológica Aké, un tesoro perdido en Yucatán. ¿La conoces?

La zona arqueológica Aké, que significa en su raíz Ak “bejuco”, recuerda a lo lejos a los emblemáticos Atlantes de Tula.

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Foto: INAH

En tu visita al municipio de Tixkokob conoce además, la “meca de las hamacas” y descubre la magia de los urdidores con el arte de los hilos

La zona arqueológica Aké es una ciudad prehispánica que tuvo un rol importante en la política durante el período Clásico, entre 250 y 900 d.C. Su esplendor duró hasta hasta el año 1450 y se localiza entre Izamal y la antigua ciudad de Thó (actual ciudad de Mérida).

Las 36 columnas de base cuadrada que hay en su cima.

Dónde se ubica

Se localiza en el actual municipio de Tixkokob, en el estado de Yucatán, México, a unos 33 km aproximadamente al oriente de la ciudad de Mérida. Parte del asentamiento arqueológico se encuentra dentro de la ex-hacienda San Lorenzo Aké. Una hacienda henequenera de 1912 semi abandonada, pero que hoy produce cuerdas con la maquinaria del siglo XIX.

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Los rasgos arquitectónicos que caracterizan a esta zona arqueológica se pueden observar en las estructuras que delimitan la plaza central que era utilizada para gobernantes. Su construcción destaca por sus grandes bloques de piedras toscamente labrados. Su plaza central es de 25,000 m² y la otra parte, considerada zona habitacional, abarca un área aproximada de 4 km².

Aké


Se conoce un chultún —sistema de captación y almacenamiento pluvial— a lo largo de toda el área del sitio arqueológico. Asimismo, existe un sistema de caminos prehispánicos o sacbés, compuesto por cuatro calzadas que conducen a estructuras al interior del sitio, mientras el sacbé exterior conecta con Izamal a través de 32 km de largo.

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Aké
Sacbé exterior conecta con Izamal a través de 32 km de largo

Cómo llegar a Aké

Aké se ubica a 32 km o 40 minutos de la ciudad de Mérida, por la carretera número 80 a Tixkokob, tomando la desviación hacia la derecha en el km 25.

¿La Meca de las Hamacas?

Pues sí, existen diversas poblaciones que se dedican al tejido y elaboración de hamacas, pero Tixkokob es de los más reconocidos y queda de paso para llegar a la zona arqueológica.

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Doña Damira mostrando las hamacas

La historia de las hamacas en la región

En maya a la hamaca se le conoce como ‘hayabil-kaan’ que significa cordeles para tensar o Yaab-kaan que significa muchos cordeles. 

Aké
Henequén

La hamaca viene de la voz haitiana: hamac, que significa árbol. La historia data de los conquistadores que dieron nombre a las primeras hamacas encontradas en las antillas, y que se tejieron originalmente con filamentos de corteza de árbol, hasta que con el tiempo fueron perfeccionando el tejido, pasando de unas redes con grandes hoyos, a ir cerrando el tejido y perfeccionando técnicas y materiales, donde actualmente, se hacen de Nylon (con más frecuencia), hasta el algodón y crochet.

Aké
Colores y texturas

Las hamacas de tejido más fino pero más cerrado son las de precio más elevado. En toda la región, han preferido la hamaca para dormir por la frescura que dan, sobre todo, en tiempos de verano.

Partes de una hamaca

  • Muñeca
  • Brazo
  • Cuerpo
Una tradición heredada de generación en generación

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