Un portal a Tailandia dentro de Yucatán
La mejor comida tailandesa y un jardín de fantasía se esconden en un pequeño pueblo de Yucatán.
Foto: La Casa de los Lotos
Si buscas comida tailandesa en Yucatán, hay un lugar que sobresale por encima de los demás. No sólo porque la comida es deliciosa, sino porque es mucho más que un restaurante. Es un auténtico portal a Tailandia y se encuentra en el insospechado pueblito de Baca, a 15 minutos de Motul.
El nombre de este fascinante lugar es La Casa de los Lotos. Descubre de qué se trata y por qué decimos que ir a comer ahí es toda una experiencia que va más allá de lo gastronómico.
Un pedacito de Tailandia
Si no llegas al lugar sabiendo a dónde vas, jamás sospecharías que en las afueras del silencioso pueblo de Baca, en un predio rodeado por unos cuantos terrenos baldíos y poco más, se encuentra una especie de portal a Tailandia.
Al acercarte a la entrada del edificio, verás la estatua blanca de un buda asceta, en posición meditativa, que te saluda y te hace saber que estás entrando a un sitio especial.
La casona tiene un estanque en el centro, habitado por peces koi. El lugar cuenta con dispensadores de alimento para los peces, por si te animas a alimentarlos. El pasillo sur funciona como vestíbulo, mientras que en los otros tres pasillos se acomodan las mesas de los comensales. Grandes arcos en cada flanco conectan al estanque con los pasillos de la casona. El aire circula con libertad, manteniendo el edificio bien ventilado.
Al fondo, te espera la mejor parte. Un hermoso jardín, repleto de plantas, flores, pasadizos y recovecos.
El recorrido te lleva por estanques en donde peces koi comparten hogar con lirios y, por supuesto, lotos.
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Pasas por un recinto que exhibe coloridos cristales y cuarzos. Atraviesas puentes que te llevan de una isla a otra, entre abundante y exuberante vegetación.
En el silencioso y apacible recorrido verás otro Buda blanco, haciendo el mudra vitarka, que es la señal de la enseñanza y el apaciguamiento. En general, toda la experiencia tiene un matiz muy espiritual.
La mejor comida tailandesa en Yucatán
Muy bonito y todo pero ¿y la comida?
La comida es deliciosa. El dueño de el lugar se ha asegurado de conservar la autenticidad de las recetas y cualquier cosa que pidas te transportará a las calles de Bangkok.
El restaurante cuenta con su propio huerto, en donde cultivan la mayor parte de los ingredientes que se utilizan en los platillos, por lo que la calidad está garantizada.
El favorito de los comensales es el curri, que puedes pedir verde o rojo. Está cocinado con leche de coco, como se acostumbra en Tailandia, y es ligeramente picante. Se sirve con arroz blanco al vapor, verduras y pollo o camarón.
Además, puedes degustar deliciosos rollos primavera, fritos o frescos. La sopa tom kha kat sigue una receta que combina pollo y verduras con leche de coco.
También hay una gran variedad de arroces, como el khao pad supparod, que lleva pollo, verduras y piña; o el khao pad ped, que es un arroz picante con carne.
Y ni hablar del pad thai, de fideos de arroz y bañado en salsa agridulce, una delicia.
Comida tailandesa con causa
Además de tener la mejor comida tailandesa en Yucatán, La Casa de los Lotos es también un centro terapéutico para pacientes con cáncer y otras enfermedades crónicas.
En realidad, el restaurante se hizo para financiar el centro terapéutico, el cual ofrece a los pacientes una modalidad de electroterapia, que utiliza corrientes eléctricas directas de baja intensidad para tratar tumores y otros padecimientos.
Así es que cada vez que consumas en este lugar, estarás contribuyendo a la recuperación y sanidad de otras personas.
Cómo llegar
La Casa de los Lotos se encuentra en los linderos de Baca. En auto desde Motul, toma la salida oeste, carretera federal 176 (Mérida-Motul). Al llegar a Baca, continúa derecho hasta topar con la calle Trigésima, gira ahí a la derecha y al final de la calle encontrarás la entrada.
En auto desde Mérida, toma la salida nororiente, carretera federal 176 (Mérida-Motul). Continúa hasta la desviación a Baca, gira a la izquierda para entrar al pueblo. Gira a la izquierda en calle 21 y a la derecha en calle Trigésima. Al final de la calle encontrarás la entrada.
