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Valle de los Cirios, Área de Protección de Flora y Fauna en Baja California

Este valle es hermoso e imponente por su extensión y fisonomía. La planta endémica que la da nombre al área, el cirio (Fouquieria columnaris) llega a medir hasta 20 metros.

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Valle de los Cirios, Área de Protección de Flora y Fauna en Baja California

Este valle es hermoso e imponente por su extensión y fisonomía. La planta endémica que la da nombre al área, el cirio (Fouquieria columnaris) llega a medir hasta 20 metros.

Descripción:

Justo antes de la línea que divide en dos estados la península de Baja California, se extiende el Valle de los Cirios, considerado uno de los tesoros naturales mejor conservados del planeta. Esta área natural protegida, la más grande de México, es un gran desierto entre el Mar de Cortés y el Océano Pacífico. 

Por su extensa superficie y excelente estado de conservación, su diversidad en flora y fauna, además de su diversidad de paisajes, el Valle de los Cirios es considerado Área de Protección de Flora y Fauna desde el 2 de junio de 1980. Esta área abarca la porción sur de Ensenada y el municipio de San Quintín; solo es atravesado por unos cuantos caminos de terracería y el trazo de la carretera Transpeninsular 1.

Flora y fauna en el Valle de los Cirios

El suelo del Valle de los Cirios es accidentado y diverso. Se forma de planicies desérticas, montañas, mesetas, barrancos y cauces de arroyos en poco más de 2 mil 500 hectáreas, de las cuales 600 kilómetros son de costa. A veces regala la sorpresa de un oasis con todo y palmeras o se transforma en un acantilado que se desplaza en picada hacia el mar.

Es de origen tropical con gran diversidad de flora y una alta proporción de especies vegetales endémicas –alrededor de 700– , es el hábitat de numerosas especies de fauna silvestre. Aquí más de 100 especies de animales son residentes de su extenso paisaje. Es hogar de borregos cimarrones, venados bura, pumas y reptiles que no han de encontrarse en otra parte. El berrendo o antílope americano aparece por estaciones, lo mismo que las aves de paso.

Con la llegada de las lluvias cambia la fisonomía del desierto. Las tonalidades verdes cerosas y ocres sirven entonces de fondo al intenso rojo de las flores que sueltan las cactáceas. Pero, si hay algo que no permuta, es la existencia de los emblemáticos gigantes de la zona: cirios, el árbol cactáceo de más de 15 metros de altura, cardones y torotes blancos se elevan por encima de mezquites y chamizos y en su altura se concentra la belleza.

La huella humana

La presencia humana en el Valle de los Cirios ha sido mínima, pero quedan vestigios de su paso por estas tierras. Fósiles, pinturas rupestres y petroglifos dan cuenta del recorrido de tribus nómadas durante milenios. Las dos misiones mejor conservadas de todo el estado, la de San Francisco de Borja Ádac y la de Santa Gertrudis la Magna, se levantan en medio del desierto. Quedan, además, las ruinas de numerosas instalaciones mineras que operaron durante los siglos XIX y XX en el área.

Familiar

Naturaleza

Románticas

Ubicación

Valle de los Cirios, Baja California, Guerrero Negro, B.C.S., México