Centenario de la muerte de Francisco Villa, siguiendo las huellas del general
Revive los episodios más emotivos de la vida de Pancho Villa. ¡Te contamos dónde puedes hacerlo!
Foto: Fideicomiso Ah Chihuahua
2023 es el año del centenario de la muerte de Francisco Villa. Como los miembros del Frente Nacional Villista suelen decir, “Doroteo Arango nació en Durango, pero Francisco Villa nació en Chihuahua”.
Francisco Villa, el comandante en jefe de la poderosa División del Norte, murió en Hidalgo del Parral el 20 de Julio de 1923. A partir de ahí, Pancho Villa se convirtió en leyenda.
Villa es sin duda el mexicano más conocido en el mundo. La fascinación que provocaron sus hazañas, su inteligencia en las lides militares y su valor a toda prueba, le hicieron un referente, dándole un sitio en la historia no sólo de México sino del mundo.
Con motivo del centenario de la muerte de Francisco Villa, compilamos algunos de los episodios clave de su vida a través de los lugares que fueron escenarios y que permanecen en pie.
Siguiendo las huellas del general en la Heroica Ciudad Juárez
El 10 de Mayo de 1911, los generales Pascual Orozco y Francisco Villa, al frente de 3,500 hombres, tomaron por las armas Ciudad Juárez. El objetivo era consolidar el movimiento revolucionario en el norte de México y propiciar la caída del régimen del dictador Porfirio Díaz.
Ciudad Juárez cuenta con un magnífico museo en el edificio de la antigua aduana fronteriza dedicado a la Revolución Mexicana. El edificio y el museo fueron restaurados en 2010 con motivo del centenario del inicio de la Revolución Mexicana. En este recinto también se celebró en octubre de 1909 la reunión de los mandatarios de México y Estados Unidos, Porfirio Díaz y William Taft. Sin conocerse a ciencia cierta lo tratado en esa reunión, a partir de esa fecha se notó un gran distanciamiento entre los gobiernos de México y de Estados Unidos.
Siguiendo las huellas de Francisco Villa en San Andrés Riva Palacio y en Chihuahua
En San Andrés, municipio de Riva Palacio, desde el 2008 se realizan representaciones de la boda de la señorita Luz Corral y el entonces coronel Francisco Villa. Los actores y asistentes al evento son invitados a que vistan a la usanza de la época de la revolución para darle mayor mayor realce a este hecho histórico.
Doña Luz, como cariñosamente se le conocía a la señora de Villa, platicaba que conoció a Francisco Villa en la tienda de su papá en San Andrés, cuando ella tenía sólo 17 años. La primera vez que lo vio llegar, nunca imaginó que dos años después estaría celebrando sus nupcias en la parroquia de San Andrés Apóstol con aquel hombre que decían venía de Durango.
Cuando Villa fue gobernador provisional del estado de Chihuahua (1913 -1914), compró el solar a su propietario Nicolás Saldívar y lo mandó reconstruir. La propiedad había sido utilizada como rastro y la convirtió en la casa habitación del matrimonio Corral-Villa.
A la muerte de Doña Luz, que sobrevivió al general hasta 1981, la propiedad del matrimonio Villa-Corral fue donada al Ejército Mexicano. Esta institución la convirtió en el Museo de la Revolución Mexicana. Se trataba de una amplia construcción en cuya parte posterior contaba con espacios para albergar inclusive a la tropa.
El museo sigue recibiendo incontables visitantes, quienes pueden apreciar en el primer piso que se conservan muebles y enceres que pertenecieron a Doña Luz. El segundo piso está dedicado por completo al movimiento revolucionario. En el patio se resguarda el automóvil que manejaba el general Villa aquel 20 de julio, cuando sufrió la emboscada que le costó la vida.
En Chihuahua capital, en el Parque Revolución, se mantiene el mausoleo que el mismo general Villa mandó construir para que depositaran sus restos. Nunca se utilizó, ya que tras su muerte fue sepultado en el camposanto de Parral. Después, sus restos se exhumaron para trasladarlos al Monumento de la Revolución en la Ciudad de México.
Hacienda de San Gerónimo y la Cueva del Coscomate
Después de que Villa atacara Columbus, Nuevo México, el 9 de marzo de 1916, el gobierno de los Estados Unidos mandó a Chihuahua una expedición punitiva comandada por un general Pershing.
De la Hacienda de San Gerónimo, hoy convertida en museo, salió el General Villa. Tenía la intención de buscar a un par de comerciantes de armas en Colombus que lo habían timado. Para fortuna de los comerciantes, no los encontró, aunque si hubieron otras bajas.
El ejército mexicano también buscaba a Villa. En un desencuentro, Villa resultó con una herida en la pierna. Ante la incursión de 10 mil efectivos del ejército estadounidense y una fuerza igual del ejército mexicano, Villa buscó refugio en una cueva cercana a San Francisco de Borja. Esta era una zona de transición entre el desierto y los llanos ganaderos.
El lugar es de difícil acceso, pero es de resaltar que en esos aciagos días el general herido logró evadir su captura, siendo más de 20 mil los efectivos buscándole.
Siguiendo los pasos del General Villa por Hidalgo del Parral
En Parral, especialmente en este pueblo mágico del que Villa expresaba que “le gustaba hasta para morirse”, hay incontables sitios donde sus moradores y la memoria popular platican anécdotas y múltiples leyendas relacionadas con Villa y sus Dorados.
Desde el Museo de Sitio Francisco Villa, que era una bodega de granos, salieron los disparos que segaron la vida del general Villa. Él estaba retirado, dedicado a las labores propias de la hacienda que le habían otorgado, pero el gobierno lo seguía considerando muy peligroso. Los gatilleros consiguieron su objetivo el 20 de julio de 1923. Esto coloca al año 2023 como el año del centenario de la muerte de Francisco Villa.
Las jornadas villistas en Hidalgo del Parral se iniciaron en 1994. En el aniversario luctuoso del General, se inició la escenificación de la muerte del general, en el sitio exacto donde sucedieron los hechos. La tragedia de la muerte de Villa sigue impactando a miles de asistentes que se congregan a ver cómo sucedieron los hechos. Es tan numerosa la concurrencia, que se mandó edificar un foro para que los visitantes puedan observar la representación con mayor comodidad.
En el año del centenario de la muerte de Francisco Villa, las jornadas villistas ocurren del 14 al 22 de julio. Constan de 150 eventos culturales que incluyen conciertos de artistas de talla internacional, así como el arribo de la gran cabalgata villista que este año intentará romper todos los retos anteri