El sabor reconfortante que encontrarás en la Fonda Doña Melva te hará sentir como en casa. Y esa es justo la idea: un sazón con el que disfrutes del sabor casero y familiar, bastante apapachador. Es un restaurante muy tradicional en Jala, Pueblo Mágico de Nayarit, razón por la que es muy recomendado visitarlo durante tu estancia en este destino. La Fonda Doña Melva tiene servicio de desayunos y comidas, por lo que es ideal para arrancar el día o disfrutar de una comida en el lugar, sin prisa. Los desayunos empiezan desde las 7:30, para los locales antes del trabajo o para visitantes que despiertan con hambre. Y hambre es justo lo que hará falta para probar varios de los platillos que se ofrecen.

El sazón de doña Melva

Garnachas, sopes, gorditas rellenas, chilaquiles y huevos al gusto. También hay enchiladas, tacos dorados y pozole. Aquí hay que probar las tostadas raspadas, que son enormes, se sirven con picadillo o pierna de cerdo, lechuga y salsa. Destaca la calidad del maíz, que en este pueblo es reconocido por tener un gran sabor. No hay que perderse el café de olla por las mañanas y en las tardes las aguas de frutas que tienen siempre frías. Además del buen sazón y la sencilla presentación de los platillos, son muy comentados sus precios, económicos y justos por lo que se ofrece. Es recomendable llegar temprano porque la variedad de platillos del menú puede reducirse rápidamente, especialmente porque no hay muchas opciones para comer en el Pueblo Mágico. Ya que muchos platillos se preparan al momento (y las tortillas también) hay que tener paciencia con la atención, que si bien destaca por ser amable, puede ser lenta. La espera vale la pena, además no hay que olvidar que este destino es para relajarse, despreocuparse y disfrutar de la vida a su tiempo. Dónde: José María Morelos 110, San Francisco, Centro, Jala, Nayarit.