Huasca de Ocampo
Su magia
En lo alto de las montañas de Hidalgo, donde los días son frescos y la niebla tiñe los paisajes de misterio, Huasca de Ocampo se presenta como un destino que combina naturaleza, historia y leyenda. Este es el primer lugar que recibió el nombramiento de Pueblo Mágico en México, y basta con visitarlo para entender por qué.
Aquí, entre bosques de oyameles, sobreviven los vestigios de haciendas construidas en el siglo XVIII por Pedro Romero de Terreros, Conde de Regla, quien llegó a ser uno de los hombres más ricos de su tiempo. Las ruinas de esas haciendas mineras ahora se funden con senderos, presas, y formaciones geológicas únicas que cuentan su propia historia.
Pero este pueblo no es solo historia ni paisajes: es también tierra de leyendas. En sus bosques, los duendes de Huasca de Ocampo protagonizan relatos populares que alimentan la imaginación de chicos y grandes. Este es un destino para detenerse, escuchar los sonidos del bosque y dejarse llevar por la magia del lugar.
El motivo
- Son columnas de piedra con forma geométrica, creadas por el enfriamiento acelerado de lava hace millones de años.
- Esta formación geológica es considerada una de las maravillas naturales de México.
- Solo existen tres conjuntos similares en el mundo: uno en Irlanda del Norte, otro bajo el mar en Hawái, y el de Huasca de Ocampo.
- Están ubicados en una barranca rodeada de cascadas y puentes colgantes, ideales para recorrer a pie.
- Desde arriba o desde el fondo, los prismas ofrecen un espectáculo visual impactante, especialmente al amanecer o tras la lluvia.
Lo básico
Bajar a la barranca de los prismas basálticos, una caminata sencilla que permite apreciar esta maravilla natural desde múltiples ángulos.
Imprescindibles
- Visitar la Hacienda de Santa María Regla, una de las más imponentes de la región.
- Probar las truchas en el Parián, un clásico de la gastronomía local cocinado de manera tradicional.
- Volar en globo sobre Huasca de Ocampo, una experiencia que ofrece vistas panorámicas de bosques, presas y pueblos cercanos al amanecer.
- Recorrer el Bosque de los Duendes, un espacio lleno de leyendas y rincones que celebran el folclor local.
Para comer
En El Parián, junto al Bosque de las Truchas, saborea el platillo por excelencia de Huasca: las truchas. Cada restaurante tiene su forma de prepararlas, pero el Restaurante 1910 destaca por su experiencia y sabor.
Para comprar
En los portales del centro de Huasca, encuentras artesanías típicas de la región como la cerámica roja en forma de jarritos, platones o cazuelas. De manera hallarás instrumentos de cocina y algunos muebles.
No pierdas de vista
Peña del aire (a 12 km). La barranca ofrece vistas únicas acompañadas de cactáceas, sembradíos de maíz y flores, este espectáculo natural se complementa con una piedra que pareciera estar suspendida en el aire. Aquí te puedes aventar en la tirolesa y sentir una fuerte dosis de adrenalina.
Taller del Alfarero. Activa tus cinco sentidos en este recorrido donde resaltan la importancia del alfarero. Visita un taller alfarero y conoce el proceso para elaborar una pieza de barro hasta su utilidad en la vida cotidiana. Además de llevarte tu pieza, te quedas con el sabor a café y buñuelos.
Cómo llegar a Huasca de Ocampo
- Auto: a 36 km de Pachuca por federal 105 Blvd. Luis Donaldo Colosio.
- Autobús: Estrella Blanca llega a Pachuca, de ahí, dirigirse al mercado Benito Juárez y tomar transporte local a Huasca.
- Avión: ADO sale a Pachuca desde el aeropuerto de la Ciudad de México y también hay transportes del AIFA a Pachuca.