Chiapa de Corzo
Su magia
Sobre la ribera del río Grijalva, en el camino a las montañas de Los Altos, se levanta Chiapa de Corzo. Cuando seas parte de él, tu vida pasará bajo la sombra de la ceiba milenaria; acompañarás a las vendedoras de pozol mientras te refrescas con esta bebida; participarás en el proceso para la elaboración de la laca y, por qué no, acompañarás a los hermanos Nandayapa a construir y aprender a tocar la marimba.
El motivo
El Cañón del Sumidero
- El pueblo se encuentra a orillas del río Grijalva, el cual serpentea a través de una falla geológica de millones de años.
- El cañón fue declarado Parque Nacional en 1980 y algunas de sus paredes alcanzan más de mil metros de altura.
- Es hogar de hocofaisanes y halcones cola roja, cocodrilos de río y monos araña.
- Asombra por su variada vegetación, las cascadas que de los muros brotan y los vestigios arqueológicos que esconde.
Lo básico
Pasear en lancha por el río que salen desde Chiapa de Corzo y llega hasta la Presa Chicoasén.
Imprescindible
- Conocer las ruinas de la iglesia de San Sebastián en el cerro de San Gregorio.
- Dar la vuelta a La Pila de inspiración mudéjar que la ciudad presume desde 1562.
- Probar en el mercado dos bebidas hechas con maíz: el pozol y el tascalate.
- Pasear en lancha por el río, desde Chiapa de Corzo hasta la Presa Chicoasén.