Hace más de diez años que Michmani, el lugar de pescadores, se vio en la necesidad de dar un giro a la actividad que por décadas era el sustento de la comunidad. Al prohibirse la pesca en la zona de los canales, seis grupos de pescadores se organizaron y crearon este espacio ecoturístico como un paseo alternativo para los habitantes de la CDMX.

Quien esté interesado en convivir con la naturaleza, debe llegar al embarcadero de Cuemanco, y con mucho ánimo para realizar alguna de las actividades que ahí se ofrecen: paseos en remo o en kayak, pescar y acampar en una chinampa.

También hay cuatro sesiones de temascal: agua, fuego, viento y tierra; el chamán promete el alivio a la ansiedad, la hipertensión o el estrés.

Al recorrer los circuitos es posible apreciar las chinampas con sus producciones de hortalizas y más de cien plantas medicinales. Ahí también crece el ahuejote o sauce; cuyas raíces enredan la tierra y capas orgánicas haciendo una especie de tejido que mantiene a las chinampas unidas. Además, este árbol ayuda a mantener el clima en la CDMX; sin la presencia de ellos, la temperatura aumentaría y habría más escasez de agua.

Para quienes deseen permanecer por más tiempo de este ambiente, aquí hay una zona de cabañas en las que se puede disfrutar de una lunada. En este lugar también se dedica especial atención a la conservación del ajolote.