Descripción:
Es el negocio de la familia Ayala Estrada: un bar que simula una tienda de raya. De hecho, la impresionante barra que adorna el lugar tiene más de cien años y se hizo con ese propósito. La familia se dedica a coleccionar, vender y preparar 890 diferentes tipos de cerveza, tanto nacionales como extranjeras. Y lo hacen entre básculas y cajitas, muñecas, radios de años, cámaras fotográficas, planchas, llaves oxidadas, objetos propios de mineros, teléfonos ya tenidos por viejos y una bicicleta dispuesta a olvidarse del mundo en lo alto de la barra. Alguien entra pidiendo un “toro rojo” (michelada con clamato) o una “sangrichela” (cerveza con vino tinto), mientras otros prefieren la cerveza de sabores y le regalan al paladar una que sepa a chocolate.