Descripción:
A solo dos kilómetros de Huauchinango aparece la comunidad de Cuacuila. Una tierra donde la gente solía hablar con el fuego cuando se trataba de pedir a alguien en matrimonio, y donde las copas de los árboles estaban habitadas por gusanos de seda que otorgaron al pueblo su nombre. Todavía se habla náhuatl y las mujeres no han perdido la costumbre de vestirse como lo hacían las que vivieron antes de ellas. Reconocida es la forma en que bordan blusas, servilletas y manteles que deben buscarse entre los puestos de artesanías de Huauchinango. Pero son los tamales que aquí se preparan los que nadie ignora.
Ubicación
Cuacuila, Pue., México